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El municipio de Orihuela lleva desde 2018 con presupuestos prorrogados, a pesar de haber sufrido una DANA, el temporal Gloria y una pandemia.
Desde Cambiemos consideran a todas luces insuficientes estos presupuestos y los tachan de post-supuestos, porque, en palabras de su coportavoz, María Sandoval, “cuando deberíamos estar hablando de los presupuestos para 2022 estamos pendientes de un proyecto de presupuestos que está casi ejecutado. Que, además, es casi un calco, hecho con prisas, del que presentaron el año pasado para el ejercicio 2020 y que, como preveemos que ocurra este año, no se aprobará. En seis años de gobierno de PP y Cs solo han sido capaces de sacar adelante 3 presupuestos. Dice mucho de la incapacidad de sus representantes para gobernar esta ciudad. Máxime, cuando hemos pasado situaciones tan absolutamente excepcionales como las inundaciones de 2019 o la crisis sanitaria por COVID, cuyas consecuencias están latentes. Por no hablar de la nula participación ciudadana en su elaboración y los vicios en el método de formulación, que los hacen opacos e imposibles en multitud de ocasiones de saber a qué van destinadas las partidas exactamente. Entre otras cuestiones como la total ausencia de perspectiva de género en la implementación de las partidas, algo que es imperativo legal”. El Gobierno Local utiliza la fórmula de la modificación de crédito, al carecer de presupuestos actualizados, para poder realizar inversiones, un vicio, que desde Cambiemos consideran que provoca perjuicios al municipio.
Los presupuestos menos sociales
Ante las declaraciones de Emilio Bascuñana en las que aseguraba que estos presupuestos serían los más sociales, desde la formación municipalista consideran que nada más lejos de la realidad. “Los hechos lo demuestran, el aumento de la partida de Servicios Sociales está destinado en su mayor parte al pago de las demandas de trabajadoras del área por una pésima gestión. No se ha ampliado la plantilla de Servicios Sociales, hemos perdido incluso ayudas de Conselleria en materia de emergencia habitacional, como ya denunciamos, y no hay ninguna política nueva para sostener a las personas más afectadas por la pandemia. El continuismo y la nula preocupación por las vecinas y vecinos de Orihuela son la tónica de este Gobierno, más preocupado por su guerra interna que por solucionar las graves carencias del municipio”.
Inversiones sin proyecto
Respecto al plan del Partido Popular de solicitar un crédito de casi 28 millones de euros para realizar inversiones, Sandoval ha destacado la carencia de información, “no estamos, a priori, en contra del endeudamiento si éstos fueran de la mano de una lógica, de unos proyectos definidos y coherentes con las necesidades de Orihuela, realizados de la manera más participada posible entre todos los agentes afectados. De hecho, hemos defendido siempre la necesidad de acabar con el techo de gasto, por considerarlo un freno a las inversiones de cercanía realizadas por los ayuntamientos. Son, en definitiva, unos presupuestos extemporáneos políticamente carentes de un plan para sacar a Orihuela de la desidia en la que se encuentra”.
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